Durante todo el sábado fue intenso el tránsito en la principal frontera terrestre de Uruguay, en el comienzo de vacaciones de primavera. Sobre las 9.30 horas, la espera para poder cruzar hacia Argentina, demandaba dos horas y media, lo que después se redujo cuando Prefectura y Gendarmería tomaron la decisión de “frenar” la llegada de decenas de camiones que esperan en la cabecera argentina para poder ingresar a Uruguay. De esta manera se liberó parte de la explanada y se pudo ordenar mejor el transito turístico.

Migración Argentina habilitó cuatro carriles de salida y los tiempos de espera se redujeron a una hora.   

“Viajamos con la idea de disfrutar toda la semana y aprovechando que el cambio esta vez nos favorece” explicó Bruno mientras esperaba poder cruzar junto a su esposa y dos hijos.

“Por lo que vimos previamente en internet, en hotelería pero sobre todo en el área gastronómica, la diferencia de precios con Uruguay es considerable” opinó Gabriela desde otro vehículo. 

Andres, uno de los choferes de una de las 30 excursiones que esperaban por los trámites migratorios, dijo que salieron de madrugada con la intención de evitar las colas algo que finalmente no fue posible.

“Esto está todo en obra y hay mucha gente que está saliendo aprovechando la brecha cambiaria. Salimos temprano desde Montevideo, pero igual no pudimos evitar una larga espera” indicó. 

 El tendido binacional se encuentra en el mayor proceso de obras desde que se inauguró en 1976. Con una inversión superior a 7 millones de dólares, las autoridades confían en modernizar la puerta de entrada al país, adaptándola al siglo 21 y dividiendo el área de comercio exterior (entrada y salida de camiones) del tránsito de turistas.  Para el principio de la próxima temporada, será habilitada una amplia zona que está siendo reconstruida, lo que permitirá habilitar 20 carriles en ambas direcciones con lo que se agilizará notoriamente el pasaje de turistas.