El día 9 de enero de 2020 en audiencia ante el  Juzgado Letrado Departamental de Fray Bentos de 3er. Turno fué formalizado Hector Leandro Pérez Zamora, como presunto autor de  un delito de lesiones personales agravadas por cometerse en la persona de la concubina en concurso formal con un delito continuado de violencia doméstica especialmente agravada por ser víctima mujer, un delito de violencia privada agravado, dos delitos de amenazas agravados,  y un delito de tenencia no autorizada de arma de fuego , imponiéndosele como medida cautelar la prisión preventiva por el plazo de 180 días.

Héctor Leandro Pérez Zamora y la víctima C.M.  mantenían una relación de pareja desde hace 14 años, teniendo dos hijos en común. Durante ese lapso tuvieron esporádicos separaciones y reencuentros.

Hace aproximadamente tres o cuatro años el indagado, quién consumiría pasta base, comenzó a tornarse agresivo con su pareja, comenzando a destratarla verbalmente, controlar sus comunicaciones por celular, celarla y golpearla en forma habitual, cuando este se iba de la casa por días y volvía solamente a bañarse, comer y volver a irse. Cuando la víctima le reclamó por su conducta, la respuesta empezaron a ser los golpes.

Así el 1ero. de enero de 2020 en horas de la madrugada tras una de la habituales idas y vueltas de Pérez, este le propinó a C.M. un golpe de puño en el rostro, cuyo hematoma era aún visible en el día de hoy. La Sra. Médico Forense en su informe pericial constata múltiples lesiones, con diferentes días de evolución,  y que revisten el carácter de lesiones personales.

La víctima refiere además que en una oportunidad y tras una discusión Pérez extrajo una pistola calibre 22 que guardaba en la casa y la amenazó apuntándole a la cabeza.

Los testigos hablaron de un constante y sostenido destrato de Pérez hacia su concubina, en una relación que se gestó practicamente en la niñez de la víctima que se inició a sus 12 años y la convirtió en madre a los 14 años por primera vez. Hubo tres denuncias previas por estas agresiones pero la víctima siempre desistió de la instancia, volviendo al círculo vicioso de la violencia.

El día 6 de enero en horas sobre la 6 de la mañana Pérez se dirigió a la casa de la familia que le había dado ayuda a la víctima y amenazó con el arma de fuego en dos oportunidades al jefe de familia, en una de ellas estando presentes los hijos menores de aquel.

El día 7 de enero, mientras se ocultaba de la Policía, tras haberse enterado de la denuncias presentadas por los hechos relatados, Pérez amenazó de muerte con la pistola, apuntándole en la cabeza, a la persona que le había permitido pernoctar en su domicilio, exigiéndole que le consiguiera una moto para irse de Nuevo Berlín.