El Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca comenzó el debate para construir un sello de agricultura familiar en Uruguay. El director de la cartera, José Olascuaga, recordó que el MERCOSUR recomendó adoptar instrumentos de visibilidad, como un sello, que permitirá diferenciar sistemas de producción, agregarles valor y brindar al consumidor información y garantías. “Estamos iniciando un camino de aprendizaje", subrayó

El director general de Desarrollo Rural, José Olascuaga, señaló además que la jornada realizada el 21 de mayo y organizada por la Dirección General de Desarrollo Rural y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) es muy necesaria, pues aporta un "cuerpo de conocimiento social más sólido" sobre la temática, para posteriormente definir y construir un sello de la agricultura familiar.

“La temática sobre marcas o sellos es parte de una estrategia que se aplica a nivel de mercado acompañada de procesos de certificación y trazabilidad de los productos”, señaló Olascuaga en la mesa de apertura del diálogo. Recordó que a nivel del MERCOSUR existe la recomendación de adoptar instrumentos de visibilidad bajo la forma de sello de la agricultura familiar.

En ese sentido, varios países de la región —Argentina, Chile, Ecuador, Bolivia— están en proceso de construcción de un sello o marca para distinguir los productos de la agricultura familiar con la finalidad de diferenciar sistemas de producción, agregarles valor y ofrecer al consumidor información y garantías.

"La simple condición de agricultor familiar no sería atributo suficiente para agregar valor, si esto no va acompañado de otros atributos, y tendremos que discutir muy bien cuáles son esos atributos. Con esto estamos iniciando un camino de aprendizaje", subrayó.

Por su parte, el representante de IICA en Uruguay, Antonio Donizeti, informó que a partir de 2014 este organismo cambió su modelo de cooperación técnica, y que "la columna vertebral" son los llamados proyectos insignia, a través de los cuales se ha dado importancia estratégica a la agricultura familiar.

Resaltó que a través de un convenio se estrechó la relación con el Ministerio de Ganadería y que esto ha permitido trabajar respecto a algunos temas estratégicos en referencia a la validación de experiencias y saberes de la agricultura familiar, la preparación de un documento técnico vinculado con el sello de la agricultura familiar y la colaboración en el armado de un documento sobre el funcionamiento de las Mesas de Desarrollo Rural.

La agricultura familiar en Uruguay registra a 23.000 productores en la Dirección General de Desarrollo Rural e implica a más de 27.000 personas, a los cuales se les brinda hasta 90 % de ayuda en sus proyectos.

La jornada realizada el 21 de mayo y organizada por la Dirección General de Desarrollo Rural (DGDR) y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura incluyó la participaron de delegados de las organizaciones y gremiales rurales y la institucionalidad pública vinculada a los sectores agropecuarios de Uruguay.