El Ministerio de Salud Pública (MSP) divulgó en la noche de este jueves un informe epidemiológico del Departamento de Vigilancia en Salud de la cartera que da cuenta del avance de la pandemia de COVID-19 en Uruguay desde la detección de los primeros casos el 13 de marzo y hasta el 22 de julio.

Al 22 de julio se han confirmado por laboratorio 1.117 casos del nuevo coronavirus (incidencia acumulada de 31.63 casos por 100.000 habitantes).

De acuerdo a la investigación de las autoridades sanitarias de la "curva epidémica" identificaron seis brotes. "Se observa inicialmente un brote el 10 de marzo vinculado a un evento social, luego aumentos en el número de casos el 8 de abril que corresponde a un brote ocurrido en una institución de salud, el 23 de abril al brote en ELEPEM (casas de salud), el 24 de mayo al brote ocurrido en la ciudad de Rivera, el 18 de junio al brote ocurrido en el departamento de Treinta y Tres y el 15 de julio relacionado fundamentalmente a brotes en instituciones de salud", sostiene el texto.

¿Cómo contrajeron COVID-19 las personas en Uruguay? “La mayoría de los casos presentan antecedente de contacto con casos confirmados (61,3%) o de viaje a una zona de transmisión activa (22,5%). La proporción de casos sin noción de exposición clara o en investigación es, a la fecha, menor en términos relativos y se ha mantenido estable en el último mes”, señala. 

Del total de casos confirmados en el país, 53% son mujeres y la mayor parte de los contagios, en tanto, se dio en el grupo de 25 a 34 años (247 personas en total). En el extremo opuesto, el grupo de menores de 15 años fue el que menos se enfermó: solamente se registraron 35 casos en este periodo. “Solo dos niños generaron casos secundarios”, indica además el informe del MSP. 

Por otro lado, 129 personas (11,6% del total de contagiados) debieron ser hospitalizadas. De este total, 92 ingresaron a cuidados moderados y estuvieron allí en promedio siete días. En tanto, 37 pacientes (el 28,7% de los que fueron internados) fueron al CTI. “De los pacientes que requirieron ingreso a UCI, 13 egresaron a domicilio o a otras áreas de internación y 22 fallecieron (los dos restantes permanecen ingresados)”, detalla el informe. “Los pacientes permanecieron ingresados en UCI un promedio de 20.8 días”, agrega. UCI es la denominación que utiliza el MSP para referirse a la Unidad de Cuidados Intensivos, también conocida como CTI.

“En los individuos de sexo masculino la proporción de ingresados a cualquier área es mayor que en el sexo femenino, presentando mayor riesgo de internación que el sexo femenino”, indica. En proporción, las personas que ingresaron más al CTI fueron los de 75 años y más.

La letalidad es de 3,04% y la mortalidad es de 0,96 por 100.000 habitantes. “El 100% de los fallecidos presentaba comorbilidades, y el 75% de ellos pertenecían al grupo de 65 años y más”, indica el informe, que agrega que el 80% de las personas que murieron eran hombres.

Una de cada cinco personas con COVID-19 (en concreto, el 21,2% del total de contagiados) no presentó síntomas de la enfermedad. “Estos casos asintomáticos corresponden en su mayoría a personas que fueron estudiadas por corresponder a contactos de casos confirmados o en el marco de investigaciones de brote o testeos masivos o por muestreo”, precisa el informe.

Entre quienes sí tuvieron síntomas, en tanto, los más frecuentes fueron tos, fiebre, odinofagia, rinorrea, disnea, disgeusia y anosmia.

De todas las personas que contrajeron coronavirus desde marzo, el 33,9% tenía comorbilidades. Las más comunes son la cardiopatía (16,9% de los casos) y la diabetes (6,1%). Si se mira los pacientes que requirieron internación, el 72,9% tenía alguna comorbilidad.

“Se registraron cuatro casos positivos en embarazadas, dos cursando primer trimestre de gestación y una cursando segundo semestre”, detalla el informe.

Por otro lado, este trabajo del MSP da cuenta del número reproductivo de COVID-19 en Uruguay –conocido como Rt- que muestra cuántos contagios genera una persona enferma a lo largo del avance de la pandemia en el país. “Durante la primera semana de la epidemia se observaron los valores más altos de Rt (el máximo estimado fue 3,8), luego el Rt disminuyó por debajo de 1 correspondiendo a la aplicación de medidas de control del brote vinculado al evento social y la adopción de medidas generales de distanciamiento físico”, señala, y agrega que se “alcanzó el valor mínimo de Rt (0,42) al mes de iniciada la epidemia”. “En la última semana se observa un aumento del Rt vinculado al brote en prestador de salud, se alcanzaron valores máximos de 1,50 para luego disminuir a 1,15”, añade.

A su vez, sostiene que hasta el 22 de julio habían identificado 63 “brotes comunitarios”, 37 de los cuales fueron calificados de “intrafamiliares”. Por cada caso confirmado de la enfermedad se logró identificar a 11,2 contactos.

Fuente El País.