Una triste noticia que revela cómo la cepa P1 está causando estragos en nuestra población.
En la jornada de hoy se confirmó que una joven fraybentina de 32 años, murió luego de estar internada en el CTI de Salto, hace 13 días con diagnóstico de COVID-19.
En el núcleo familiar todos contrajeron el virus, pero su esposo, un militar del batallón Rincón, su hijo adolescente y los padres de la joven se vieron afectados pero cursaron la enfermedad sin problemas.
Un médico consultado por el canal 11 de Fray Bentos, explicó que la joven estaba embarazada de 20 semanas y sólo presentaba sobrepeso.
Este tipo de casos, muy tristes, deben hacernos tomar conciencia de la gravedad de la situación.
Los médicos advierten que, con la presencia de la cepa Manaos, ha aumentado considerablemente la mortalidad entre personas obesas sin importar la edad.