Su hermana Miriam denunció que tanto la Policía como la Justicia en ningún momento se comunicaron con el esposo de la víctima o con algún otro familiar.

"Pudimos ver en Montecarlo el video (de la cámara de seguridad) que grabé con mi celular; al analizarlo he visto otras cosas que obviamente no me agradaron para nada. Aparte del asesino hay algunos movimientos que me llaman la atención y quisiera hablarlo con las autoridades", indicó Miriam Gonnet.

En las imágenes aparece la joven que está siendo sujetada por otra mujer que le impide movilizarse.

"El momento es espantoso, todo ocurre en segundos y naturalmente todos están asustados. Incluso, mi hermana no se movió para nada, no intentó salir, mi cuñado tampoco. Pero hay una mujer que parece inmovilizar a Diana, se la puso enfrente, y después, durante el escape del asesino y atrás el guardia de seguridad, también se da justo la salida de mi hermana. Para mí existen otras cosas y hay detalles que los investigadores no pueden pasar por alto", afirmó la familiar, quien viajó de inmediato a Montevideo para estar junto a Diana en las 28 horas que permaneció con vida, internada en un CTI.

La gran duda.

Miriam sostiene que le llama la atención que justo cuando empieza la balacera "sacan y exponen" a su hermana. "No sé si fue por el susto de la otra mujer, pero es muy doloroso y por lo menos necesitamos una explicación".

La hermana de la víctima insiste en que las autoridades nunca la llamaron, como tampoco a su cuñado o a testigos.

"A mi hermana le hicieron un millón de autopsias, pero nunca nos pasaron parte de eso. Los encontraron, están presos, ¿pero serán o no serán? El esposo de Diana, mi cuñado, fue a radicar la denuncia y nunca se volvieron a comunicar con él".

Miriam agrega que por testimonios de quienes estuvieron en el lugar, las ambulancias no llegaron a tiempo y los móviles policiales tampoco estuvieron en 4 minutos, como informó el Ministerio del Interior, sino que demoraron cerca de un cuarto de hora.

En duelo.

"Luego de trabajar duro durante doce años junto a su esposo, mi hermana había logrado comprarse su apartamento, pero ellos llegaron a disfrutarlo solo cuatro meses. Le truncaron la vida a ella. Y a todos nosotros también, mi padre está muy enfermo. Todo es muy triste ahora" expresó Miriam, a la vez que anunció que, cuando la familia procese la angustia por lo sucedido, empezará a contactarse con personas que sufrieron tragedias similares a las de sus familia.

"Vamos a seguir luchando y reclamando para que nos defiendan y nos cuiden porque para eso están las autoridades. Queremos reunirnos con familias que sufren la misma inseguridad, y si es necesario viajaremos a Montevideo a participar de marchas, a hacer lo que sea para que se den cambios porque no queremos que haya otra Diana. Su muerte no puede ser en vano", sentenció Miriam.