El movimiento fue sostenido durante todo el día, estimándose que serán más de 10 mil los turistas que llegaron al país en una sola jornada. 

En el área de ingreso, Migración atiende con seis casetas y a diferencia de otros fines de semana, el pasaje es fluido. “Se está atendiendo con seis vías de acceso y las demoras  no superan los 35 o 40 minutos” informó Julio César Cardozo, dirigente de la Asociación de Funcionarios de Migración (AFUMIGRA).

Datos de Aduana, dan cuenta que al terminar el mes de enero, han ingresado a Uruguay, más de 120 mil personas en poco más de 33 mil vehículos. En 2015, en todo enero, ingresaron 110 mil argentinos en 30 mil vehículos. 

“El incremento de un año a otro rondará entre el 10 y el 15%” indicó un funcionario que prefirió mantener su nombre en reserva. 

Esta percepción es compartida por Cardozo y un grupo de funcionarios de Migración con años de experiencia en la principal frontera terrestre uruguaya. 

“No podemos precisar qué porcentaje, pero a simple vista se nota que el movimiento ha crecido en relación a la temporada anterior” sostuvo el dirigente gremial.

Prefectura optó por generar un “pulmón” en la explanada donde se originan las colas porque otros fines de semana la acumulación de cientos de camiones intentando también llegar a destino, generó un verdadero caos de circulación que en esta ocasión puso organizarse. 

TAX FREE. Mientras miles de personas hacían cola para ingresar a Uruguay, en el área de egreso cientos de turistas pasaban por Aduana para gestionar los beneficios fiscales otorgados por el estado uruguayo.

“Es un trámite normal que tenemos que hacer ante Aduana de Uruguay antes de volver  Argentina” indicó Clarisa, una mujer que hacía la cola frente a los funcionarios estatales. 

“Presentamos cédula, documentos y facturas de compras en comercios adheridos y  el estado nos devuelve un porcentaje del IVA que es depositado en nuestra cuenta bancaria. Todo ayuda y no deja de ser un estímulo para quienes optamos por vacacionar en Uruguay” consideró.

Dos jóvenes funcionarias de Aduana atendían éste tipo de trámites mientras un experimentado funcionario reflexionaba: “terminamos trabajando para una empresa privada que cobra una comisión por intermediación. Nosotros hacemos el trabajo  pero son ellos los que cobran un porcentaje por cada trámite” advirtió el aduanero que reconoció que “ni el gremio pudo frenar esta iniciativa”.