El ministro designado del Interior, Jorge Larrañaga, se reunió ayer por primera vez con los 19 jefes de Policía que estarán al frente de la seguridad de cada uno de los departamentos a partir del 1° de marzo. Consultado en conferencia de prensa sobre los lineamientos que dio a los jefes, Larrañaga dijo que lo primero que les pidió es “dar la cara en todo el país”, así como “tener un despliegue territorial permanente” y mostrar “resultados”.
“Todos tenemos que tener conciencia de que estamos obligados a hacer el máximo esfuerzo para el combate contra la delincuencia”, señaló el líder de Alianza Nacional, quien estuvo acompañado en la reunión por el subsecretario designado, Guillermo Maciel, el futuro director general de Secretaría de la cartera, Luis Calabria y el próximo director nacional de Policía, Diego Fernández. Participantes de la reunión contaron a El Observador que el encuentro fue breve y conciso, y que tuvo como uno de sus principales objetivos el “conocimiento” entre sí de todos los jefes designados.
Sin embargo, aunque no hubo mucho espacio para la presentación de temas concretos relacionados a la próxima gestión de seguridad, Larrañaga les pidió a los futuros jerarcas que manejaran con “absoluta reserva” lo conversado en el encuentro, que tuvo lugar en la sala de ministros del Palacio Legislativo. Los informantes añadieron que el próximo secretario de Estado de la cartera de seguridad les dijo además que hasta que no comience oficialmente la nueva gestión, los voceros serán el propio ministro y el director Fernández.
Según supo El Observador, pese a que la reunión fue coordinada días atrás, hubo algunos jerarcas que debieron suspender sus vacaciones, en algunos casos en el exterior. Tal como anunció el presidente electo Luis Lacalle Pou a lo largo de la campaña electoral, el 2 de marzo habrá una reunión en la Torre Ejecutiva con todos los jefes de Policía.
El objetivo de ese encuentro es “señalar la trascendencia y la importancia” que representa la “convivencia y seguridad pública” de cara a los próximos años, señaló Larrañaga en la rueda de prensa. “Tiene que quedar claro que le pedimos a la población la valoración de la Policía, el esfuerzo conjunto para ayudarnos a recuperar la mejor convivencia entre todos los uruguayos”, pidió el futuro ministro.
Consultado respecto a los primeros cambios que la población notará en materia de seguridad pública, el futuro ministro aseguró que no andaría “anunciando grandes cambios”. “Lo que sí digo es que vamos a trabajar, a hacer que las cosas pasen y hacer un enorme esfuerzo para mitigar los impactos de la delincuencia y el clima de violencia”, afirmó.
La cúpula del ministerio pidió a los jefes de Policía que hagan un “relevamiento” sobre cuál es el “estado de situación de cada departamento”, para que puedan aportar “sugerencias” en una segunda reunión previa a la asunción. El tema de la seguridad es una de las áreas prioritarias para el nuevo gobierno, que incluyó varias medidas en ese sentido en el anteproyecto de ley de urgente consideración que será sometido a discusión parlamentaria en los primeros días de marzo.