CARU CULMINÓ CAPACITACIÓN REGIONAL PARA GUARDAVIDAS
Se formó sobre vigilancia de cianobacterias en el río Uruguay.
La Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) cerró en nuestra ciudad la última de las jornadas de capacitación para guardavidas y actores vinculados a la gestión de playas, con el objetivo de reforzar la vigilancia visual de floraciones de cianobacterias y mejorar la prevención de riesgos sanitarios durante la temporada estival.
La instancia formó parte de un ciclo regional que también incluyó actividades en Concepción del Uruguay y Concordia.
El taller, denominado “Vigilancia visual y prevención de riesgos ante floraciones de cianobacterias en playas del río Uruguay”, fue organizado por el Departamento de Ambiente de CARU y contó con la participación de guardavidas de Paysandú, Colón, San José y Las Cañas, además de funcionarios de áreas de Bromatología y de direcciones de salud de ambas orillas.
CAPACITACIÓN TEÓRICO- PRÁCTICA.
La propuesta combinó exposiciones técnicas con actividades prácticas en la playa.
Las docentes responsables fueron Lizet De León, bióloga del Ministerio de Ambiente de Uruguay y asesora de la Subcomisión de Calidad de Agua y Ambiente, y Ana Laura Ruibal Conti, bioquímica del Instituto Nacional del Agua (INA) de Argentina, especialista en monitoreo de cuerpos de agua con floraciones recurrentes.
Durante la mañana se presentó el Programa de Vigilancia de Playas, con el que CARU realiza monitoreos semanales desde 2009.
Posteriormente, De León explicó qué son las cianobacterias, por qué se producen las floraciones algales y cuáles son los factores que favorecen su desarrollo, como la mayor disponibilidad de nutrientes, la temperatura del agua o la presencia de remansos.
Luego, Ruibal expuso sobre los tipos de toxinas que pueden producir algunas cianobacterias, sus efectos en la salud humana y los criterios para establecer medidas de precaución o suspensión del baño.
RECONOCER LOS ESTADOS DEL AGUA.
Uno de los ejes del taller apuntó a entrenar a los guardavidas en el reconocimiento visual de los distintos estados de floración, una escala que permite evaluar si la playa puede habilitarse para uso recreativo.
Los técnicos explicaron tres niveles:
Estado 0 (vigilancia): no se observan manchas verdes, ni acumulaciones en superficie ni en la arena. El uso recreativo es seguro.
Estado 1 (transición): hay indicios de floración, pero aún permiten el uso de la playa con precauciones. Es el estado más difícil de discernir y exige observación detallada.
Estado 2 (floración desarrollada): el agua presenta fuerte coloración verde y acumulaciones extendidas, incluso en la arena. En este caso, se recomienda restringir el ingreso al agua.
Los guardavidas, señalaron los técnicos, son las personas que “están todos los días en la playa” y que los usuarios consultan ante dudas. Por eso, además de reconocer los estados, deben aplicar criterios de precaución, orientar al público --especialmente a familias con niños, quienes son más vulnerables y, en caso necesario, utilizar la bandera sanitaria.
PRÁCTICA EN EL RÍO Y MATERIAL DE APOYO.
Tras la teoría, el grupo realizó una práctica en la costa sanducera para reforzar el monitoreo visual.
Como cierre, CARU entregó a los responsables de los servicios de guardavidas carteles para las torres de vigilancia, con un código QR que dirige al Manual de Buenas Prácticas sobre floraciones de cianobacterias.
Las responsables técnicas del Departamento de Ambiente de CARU, la tecnóloga química Gabriela Sena y doctora Natalia Rougier, lideraron el diseño de los contenidos, coordinaron las instancias teóricas y prácticas y acompañaron el desarrollo de todo el ciclo de formación.
El Departamento de Ambiente destacó el compromiso de los participantes, incluidos representantes de las intendencias de Paysandú y Río Negro y del Municipio de Colón, quienes aportaron experiencias desde sus territorios.
UN ENTRENAMIENTO OPORTUNO.
Desde CARU subrayaron que la capacitación se retomó este año luego de que las actividades se hubieran discontinuado, y tras una temporada 2024- 2025 marcada por condiciones adversas del río y por una presencia especialmente intensa de floraciones.
“Los guardavidas son quienes continúan la vigilancia durante los fines de semana, cuando más usuarios concurren a las playas. Su rol es clave para prevenir riesgos, especialmente en niños, que juegan, toman contacto directo con el agua o pueden sentirse atraídos por el color verde”, comentó el Departamento de Ambiente.
PUBLICACIÓN DE LOS INFORMES SEMANALES.
Coincidiendo con la última jornada del taller, CARU publicó este viernes el primer informe semanal de la temporada, que continuará difundiéndose hasta fines de marzo.
Cada entrega incluye: el estado visual de las playas monitoreadas, la presencia o ausencia de floraciones algales, y los valores de enterococos y Escherichia coli, bacterias de referencia sanitaria cuyos resultados se expresan en unidades formadoras de colonias.
El monitoreo abarca 24 playas del río Uruguay entre ambas orillas.
RESPUESTA A CONSULTAS DE LOS USUARIOS.
Durante la práctica, los técnicos señalaron que el estado del agua en Paysandú, al momento del taller, permitía el ingreso con precauciones.
Aclararon también que la diferencia de claridad entre las playas urbanas y las zonas de islas responde a factores como la menor intervención humana, la ausencia de remoción del fondo, la falta de tomas de agua y un ambiente más prístino, aunque incluso en las islas pueden registrarse floraciones.
COMPROMISO BINACIONAL.
La presidenta de la Delegación Uruguaya ante CARU, Cecilia Bottino, afirmó que el “objetivo central es fortalecer la capacidad de respuesta de quienes están diariamente en contacto con los bañistas, anticipándose a situaciones de riesgo y contribuyendo a una temporada más segura”.
Recordó que toda la información del monitoreo está disponible en el portal institucional de CARU.
Con esta tercera jornada, la Comisión completó su ciclo anual de formación y reafirmó su compromiso con la gestión ambiental binacional y con la protección de las comunidades que disfrutan del río Uruguay.
Fuente: El Telégrafo, Paysandú.




















