Un abogado de Villa María, actualmente jubilado y retirado de la profesión, fue incluido en un pedido de prisión realizado por la querella de los familiares de las víctimas de una tragedia aérea que se registró en 1997, toda vez que el requerimiento de los profesionales del Derecho comprende a todos los directivos de la empresa Austral Líneas Aéreas.

El jueves pasado la querella solicitó penas de entre 12 y 25 años de prisión para los acusados del siniestro aéreo, protagonizado durante el vuelo 2553 de la mencionada línea, y entre los nominados se encuentra el abogado de nuestra ciudad Walter Hayas, actualmente de 83 años.

Desde el entorno de Hayas expresaron que este “está al tanto de la situación”, aunque señalaron especialmente que “él, en ese momento, ocupaba la Dirección de Personal de Austral”; aunque “se aguarda la decisión del fiscal” Juan Patricio García Elorrio.

El juicio recién comenzó el 24 de marzo de 2019 a cargo del Tribunal Oral Federal (TOF) 5, integrado por los jueces Daniel Obligado, Adriana Palloti y José Martínez Sobrino.

Según se indicó en un informe, el avión McDonnell Douglas DC-9-32, con matrícula argentina LV-WEG, que se dirigía desde la ciudad argentina de Posadas (Misiones) hacia la ciudad de Buenos Aires, se precipitó a tierra en la estancia Nuevo Berlín, zona rural cercana a la ciudad uruguaya de Fray Bentos, luego de una falla con el sistema de tubo de Pitot.

La tragedia

El vuelo 2553 de Austral se estrelló el 10 de octubre de 1997 (próximamente se cumplirán 24 años del hecho) en Fray Bentos, Uruguay, episodio en el que perdieron la vida 74 personas.

Los abogados querellantes, Norberto Caputo y Silvina Rumachella, representantes de los familiares de las víctimas del luctuoso hecho, solicitaron en su alegato penas de entre 12 y 25 años de prisión por el delito antes apuntado para 24 de los más de 35 acusados.

Rumachella se basó en el artículo 190 del Código Penal, que precisa que “será reprimido con prisión de dos a ocho años el que, “a sabiendas ejecutare cualquier acto que ponga en peligro la seguridad de una aeronave”, porque, dijo, quedó probado que lo que sucedió ese día fue una “trampa mortal”.

La abogada, por su parte, aclaró que esa misma norma penal indica que, “si el hecho causare lesión a alguna persona, la pena será de seis a 15 años de reclusión o prisión, y si ocasionare la muerte, de 10 a 25 años de reclusión o prisión”, además de confirmar que cada conducta de los imputados “merece un reproche”.